3.1

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Plan de respuesta rápida y mitigación de la FAO en el Cuerno de África

Capítulo 3

De siete temporadas de lluvias entre 2016 y 2019 en la península somalí (en la región del Cuerno de África), seis de ellas fueron más escasas que la media. Las peores consecuencias se evitaron gracias a la alerta y acción temprana. La región está caracterizada por vulnerabilidades sistémicas subyacentes y ya estaba sufriendo un aumento de la población de langostas del desierto. Posteriormente, la pandemia del coronavirus y sus implicaciones socioeconómicas, los precios de alimentos anormalmente altos y la prolongación del conflicto y la inseguridad han empeorado las condiciones de la región. Desde octubre de 2020, la región ha entrado en una nueva fase de inseguridad alimentaria al alza por tercera temporada consecutiva. El número cada vez mayor de personas que se enfrentan a una inseguridad alimentaria aguda (Fase 3 o superior de la Clasificación Integrada de las Fases de la Seguridad Alimentaria y Humanitaria (IPC)) en la región de la Autoridad Intergubernamental para el Desarrollo (IGAD) no significa que la agenda de resiliencia esté fallando. De hecho, sin las inversiones para construir sociedades y sistemas más resilientes en los últimos 10 años, la región indudablemente estaría en una situación más crítica. Pero la recurrencia de conflictos, en combinación con choques de magnitud sin precedentes, constituye un reto que las comunidades rurales no pueden superar solas.

El plan de respuesta rápida y mitigación de la FAO para el Cuerno de África está basado en un análisis profundo de crisis o eventos de riesgo, patrones climáticos estacionales y epicentros de sequías. El plan describe el conjunto de actividades específicas de medios de subsistencia que deben priorizarse para 2022 a fin de salvar las vidas y los medios de subsistencia de 1,93 millones de personas rurales en toda Somalia. El calendario del plan va de enero a junio de 2022.

Las acciones prioritarias y los grupos objetivo son los siguientes:

• 144.000 personas rurales pueden cubrir sus necesidades alimentarias durante hasta seis meses mediante transferencias de efectivo incondicionales y condicionales.
• 770.400 agropastoralistas pueden salvaguardar sus medios de subsistencia y activos durante los próximos seis meses.
• 568.800 agricultores y agropastoralistas pueden salvaguardar sus medios de subsistencia y activos durante los próximos seis meses. Además, el conjunto de intervenciones (incluido efectivo+) asegurará la producción de hasta 40.000 toneladas de cultivos de alimentos básicos (cereales y legumbres) antes del momento de la cosecha (junio–julio de 2022), que es suficiente para alimentar a la población objetivo hasta el final de 2022 (cosecha temporada corta de lluvias).
• 16.800 pescadores pueden salvaguardar sus medios de subsistencia y activos durante los próximos cuatro meses (la temporada de pesca va de enero a abril).